Pocas cosas hay en Brasil más transversales que las chanclas: a falta de un censo fiable, se podría decir, sin miedo a equivocarse, que cada uno de los 213 millones de brasileños tiene al menos un par de las clásicas chanclas de dedo: una sandalia de goma, básica, rudimentaria, cómoda. Una imagen puramente brasileña. Las Havaianas (hace tiempo que se confundió la marca con el objeto) son (o eran) prácticamente una enseña nacional, una de esas marcas que caen bien a todo el mundo… Hasta ahora.
Boicot a las chanclas Havaianas: la última obsesión de la extrema derecha brasileña
Diputados bolsonaristas interpretan un anuncio de la marca como contrario a la derecha y emprenden una campaña en su contra